La espalda del Orthosuchus estaba protegida por placas óseas con escudos córneos cóncavos. La zona abdominal y las laterales de la cola estaban cubiertas por escamas gruesas y duras similares a las de los cocodrilos. Su hocico era bastante estrecho y plano y tenía unos dientes relativamente débiles por lo que se cree que se alimentaba de peces. Gracias a que sus miembros eran muy largos podía avanzar muy bien por las ciénagas.
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