El Herrerasaurus era un dinosaurio carnívoro de tamaño medio de Argentina que destacaba por su antigüedad, ya que data del Triásico medio, es la única especie de saurisquio "herrerasaurido".
Características
Este dinosaurio de denomino así en honor a Victorino Herrera, el campesino de los Andes que halló el primer esqueleto fosilizado de esta especie. Es uno de los primeros terópodos que se conocen. De tamaño
mediano, este carnívoro bípedo tenía dientes afilados y patas cortas terminadas en tres dedos con garras afiladas. Estas características primitivas hicieron pensar a los investigadores que el herrerasaurus era el primer dinosaurio que apareció en la Tierra. Sin embargo, el posterior descubrimiento de un cráneo completo demostró que sus terribles mandíbulas estaban demasiado desarrolladas como para tratarse de un espécimen tan antiguo. Este dinosaurio tenía el tamaño de un coche pequeño y caminaba erguido sobre dos patas y tenía una cola bastante larga que equilibraba su peso. Probablemente era un cazador muy veloz.
Técnica de caza
El herrerasaurus mataba y devoraba dinosaurios herbívoros y algunos carnívoros más pequeños que él. Atacaba con sus patas delanteras y traseras, desgarrando y destrozando a las presas con las garras de las patas. Atrapaba a sus presas con las patas delanteras y las remataba a mordiscos o con las garras de las patas traseras. Usaba la cola para mantener el equilibrio mientras corria.
Cráneo
El Herrerasaurus poseia una cabeza larga y estrecha, dotada de robustas mandibulas equipados con numerosos dientes afilados e inclinados hacia atras.
Modo de vida
El herrerasaurus vivía en zonas templadas, con una estación lluviosa durante la cual las plantas crecían de forma exuberante y una estación seca durante la cual el paisaje era semidesértico. En las riberas de los ríos y en los bosques de vegetación lujuriosa perseguía y cazaba a sus víctimas, entre las que destacaba el Pisanosaurus, un dinosaurio herbívoro, bípedo y de pequeño tamaño. Otros animales de su agrado eran el Rhynchosaurus, un herbívoro cuadrúpedo parecido al cerdo, y el Aetosaurus, también cuadrúpedo herbívoro, armado con espinas y cuernos. En pocos minutos, un herrerasaurus adulto podía desgarrar con garras y dientes a un Rhynchosaurus de tamaño grande. Por otra parte, en la época en la que vivió (finales del Triásico) tenía poca competencia; sólo había otro saurio tan agresivo y temible como él: el Rauisuchus, muy parecido a un cocodrilo. Sin embargo, el herrerasaurus, con su porte erguido, sus largas patas traseras y sus afiladas garras, era mucho más rápido, ágil y peligroso que la mayoría de sus competidores. Así, no es de extrañar que los Rauisuchus se extinguieran rápidamente, mientras que los terópodos dominaron la Tierra durante más de 150 millones de años.
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