Kaprosuchus (gr. "Cocodrilo jabalí") es un género de crocodilomorfo mahajangasúquido que vivió hace 95 millones de años, en el Cretácico superior (Cenomaniano), en lo que hoy es África.
Descubrimiento e historia[]
Cráneo holotipo. La barra equivale a 10 cm.
K. saharicus, la especie tipo, fue descrita por Paul Sereno y Hans Larsson, quienes describieron por primera vez al animal en un monográfico publicado en la revista científica ZooKeys en 2009 junto con otros crocodiliformes del Sahara como Anatosuchus y Laganosuchus. El ejemplar holotipo consiste en un único cráneo casi completo de 50,7 cm de longitud y una mandíbula inferior de 60,3 mm. Este fue encontrado en las rocas de la Formación Echkar de Níger.
Etimología[]
El nombre significa "cocodrilo jabalí" del griego κάπρος, kapros ("jabalí") y σοῦχος, soukhos ("cocodrilo") en referencia a sus dientes caniniformes inusualmente grandes que se asemejan a los de un jabalí. Su epíteto específico, K. saharicus, hace referencia a su procedencia del área nigerina del Desierto del Sahara. Fue apodado "BoarCroc" por sus descriptores.
Paleobiología[]
Cráneo en múltiples perspectivas.
La descripción original estimaba que el animal completo habría medido 6 metros de largo, aunque estimaciones más recientes lo redujeron a alrededor de 4 metros.
Cráneo[]
Poseía tres juegos de largos dientes que se proyectaban por encima y por debajo del cráneo en forma de colmillos, uno ellos sobresaliendo de la mandíbula inferior y encajando en las muescas de la mandíbula superior. Este tipo de dentición no se conoce en ningún otro crocodiliforme conocido. Estos dientes también están lateralmente comprimidos, lo cual contrasta con otros crocodiliformes de cráneo similar, que poseen normalmente dientes semi-cónicos y de tamaño reducido.
Otra característica única de Kaprosuchus es la presencia de grandes cuernos rugosos formados a partir de los huesos parietales y escamosos que se proyectan desde la parte posterior del cráneo. También se ven proyecciones similares pero más pequeñas en el estrechamente relacionado Mahajangasuchus.
Vista de las rugosidades de hocico.
La órbitas oculares de Kaprosuchus se abren lateralmente y se orientan hacia el frente más que hacia arriba, a diferencia de la mayoría de crocodiliformes actuales. Esto la habría concedido cierto grado de visión binocular, con capacidad de detectar profundidad.
La superficie de los premaxilares es rugosa con los bordes elevados por encima del cuerpo del hueso, por lo que se cree que las rugosidades en la punta del hocico habrían sostenido una cobertura de queratina. A lo largo de la sutura interpremaxilar, el área donde se unen los dos premaxilares, la superficie es lisa, dando a la rugosidad emparejada de los premaxilares un aspecto de "bigote" visto por delante.
Estilo de vida[]
Debido a la orientación hacia delante de las cuencas oculares Sereno sugirió que, a diferencia de los cocodriliformes actuales; con ojos orientados hacia arriba como adaptación a la caza en el agua, Kaprosuchus se habría tratado de un cazador principalmente terrestre. Otras razones serían sus largos colmillos, que eran largos y afilados en lugar de los dientes cónicos de otros cocodrilos cuya dieta se compone en su mayoría de peces, y la anatomía de su cráneo, que se encuentra fusionado y reforzado para suportar una fuerte pero rápida mordida y fuertes impactos en el hocico. No se tenían ni se tienen más evidencias de esto, ya que se desconoce la anatomía post-craneal del animal, pero esta idea permeó durante mucho tiempo desde su descripción en el año 2009, llevando a que se le representara comúnmente como una depredador de patas alargadas que perseguía a sus presas en tierra.
Sin embargo, ahora se cree que Kaprosuchus era más semiacuático, gracias a la evidencia proporcionada por su pariente más completo, Mahajangasuchus, del Maastrichtiano de Madagascar. Este presenta unas patas ligeramente más largas que las de cocodriliformes actuales, pero sigue presentando un plan corporal esperable para un depredador acuático. También se pueden observar adaptaciones para la vida semiacuática en el cráneo de Kaprosuchus, ya que sigue poseyendo un cráneo muy alargado y sus narinas y cuencas oculares, aunque no del todo, siguen estando colocadas en la parte superior del cráneo. Se cree que tanto este, como su pariente malgache vivían principalmente en el agua, pero estaban especializados en la caza de presas terrestres, de ahí sus fuertes mordidas, protección contra traumatismos y dientes no adaptados a cazar presas acuáticas.
Clasificación[]
Kaprosuchus es un miembro de la familia Mahajangasuchidae junto con Mahajangasuchus insignis del Cretácico Superior de Madagascar. Aunque difiere mucho de cualquier otro crocodiliforme conocido, Kaprosuchus comparte varias características con Mahajangasuchus, tales como las cuencas orientadas al frente, dientes no-conicos, cuernos parietales y el extremo posterior de la mandíbula inferior extendiendose más allá del final del cráneo.
En el momento de la descripción de Kaprosuchus, Sereno y Larrson consideraban que los mahajangasuquidos eran una familia de crocodiliformes neosuquios. Sin embargo, estudios posteriores sobre la relación de esta familia han encontrado repetidamente que forman un clado hermano de los peirosáuridos, formando un clado que a su vez se agrupa con uruguayosúquidos como Anatosuchus y Araripesuchus como una rama divergente temprana de notosuquios.
Hábitat[]
Se cree que vivió un un hábitat pantanoso y rico en biodiversidad, que dio lugar a que conviviera con varios crocodiliformes de estilos de vida muy diferentes como pueden ser Araripesuchus, Elosuchus, Fortignathus, o Laganosuchus. Compartía las aguas con peces de los géneros Ceratodus, Lepidotes y Onchopristis y habría tenido entra sus posibles presas a varias de las especies de dinosaurios con las que convivió, tales como Aegyptosaurus, Rebbachisaurus, Rugops, Carcharodontosaurus o Spinosaurus.